GERD MÜLLER: DER BOMBER

Si se habla de un goleador alemán inmediatamente viene a nuestra cabeza un nombre: Gerd Müller. El Torpedo como se le conoce en su país ha sido y será uno de los más grandes goleadores de la historia.

En sus inicios tuvo que aguantar ciertas críticas por su aspecto físico. Su primer entrenador en el Bayern, Zlatko Cajkovski, lo tachó de “levantador de pesas” el día de su presentación y lo sentó en el banquillo durante los diez primeros partidos de Liga. Pero en el primer partido que jugó fue capaz de marcar dos goles. Ese mismo día Cajkovski pasó a llamarlo cariñosamente “el gordo y bajito”

Müller empezó su carrera en el TSV Nördlingen de la liga regional en 1963, pero solo estaría un año porque enseguida el Bayern Munich se hizo con sus servicios. Allí llegó con 20 años y se convertiría en el delantero centro del gran Bayern de los 70.

Muller y su inseparable número 13

El equipo muniqués era por entonces un gran proyecto en ciernes, junto a él llegó ese mismo año Franz Beckenbauer, y con el portero Sepp Maier ya en el equipo, se formó la que seria la columna vertebral del Bayern durante más de 10 años.  Los goles de Gerd no se hicieron esperar y alcanzó los 59 en sus dos primeras temporadas, acabando máximo goleador de la Bundesliga en 1967. Su equipo entretanto ganó dos copas de Alemania y la Recopa del 67 al Glasgow Rangers. El Bayern comenzaba a sonar en Alemania y también en Europa.

El año 1969 fue importante para él pues el equipo confirmó su dominio con la consecución del doblete (Liga y copa) y Müller consiguió la friolera de 30 goles en la Bundesliga y el Balón de Bronce. Pero más lo seria el año siguiente donde ganó prácticamente todo lo que un delantero puede desear: máximo goleador de la Bundesliga (38 goles), Bota de Oro y máximo goleador de la Copa del Mundo de México con 10 tantos. No es de extrañar que aquel año se llevara además el Balón de Oro como mejor jugador europeo por delante de Bobby Moore.

Gerd era por entonces el más temido de los delanteros del panorama mundial, pero su hambre de victorias no quedaba ahí y, junto con Beckenbauer, ansiaba títulos internacionales con el Bayern y la Mannschaft. Por eso, en el año 71 la victoria en la Copa de Alemania supo a poco.

En los últimos años el Bayern había ido incorporando grandes jugadores como Breitner y Uli Hoeness, lo que dio un nuevo impulso al equipo bávaro.  Conquistó la Bundesliga de 1972 y Müller fue máximo goleador con una marca legendaria, 40 goles. Evidentemente volvió a ser Bota de Oro por segunda vez en su carrera. Ese verano con la selección llegaría el primer triunfo internacional: la Eurocopa de 1972, en la que Alemania destrozó en la final a la Unión Soviética por 3-0 con dos goles de Müller. Además se alzó con el Balón de Plata por detrás de su compatriota Beckenbauer.

Müller levanta la Copa del Mundo junto a Overath

En 1973 ganó una nueva Bundesliga y también lo que ya era casi una tradición, el titulo de máximo goleador con 36 tantos. El equipo seguía adquiriendo confianza y la llegada de Udo Lattek al banquillo muniqués había completado la transformación del equipo. El año siguiente sería inolvidable, en dos meses consiguió ganar los tres títulos mas importantes de su carrera, primero la tercera Bundesliga consecutiva, luego la Copa de Europa en una final antológica contra el Atlético de Madrid en la que fue necesario un replay y como colofón la final de la Copa del Mundo en casa frente a la naranja mecánica, en la que marcó uno de sus goles más plásticos tras un remate a la media vuelta en milésimas de segundo.

Mientras tanto el Bayern seguía imparable, no ganaba nada en Alemania pero era invencible en Europa. Así llegaron dos nuevas Copas de Europa, la primera ante el Leeds United por 2 – 0 en 1975 (Müller hizo el 2-0) y la segunda frente al Saint Etienne de Platini por 1- 0 en 1976. A finales de año también sumaría la Copa Intercontinental, el último entorchado a nivel mundial de este monstruo del gol. Dos años más tarde sumaría su sexto titulo como Torschützenkönig con su peor marca: 24 goles.

En 1979 abandonó el Bayern de Munich por un sustancioso contrato para jugar en los Fort Lauderdale Strikers de la NASL. Allí marcó 40 goles en dos temporadas y media antes de decir adios al futbol en activo.

Cuando se retiró fue contratado como imagen permanente de la marca alemana Adidas, firmando un contrato de por vida. En los años 80 reconoció tener serios problemas con el alcoholismo y fue ayudado por sus antiguos compañeros del Bayern, en especial por Uli Hoeness. Desde entonces trabaja para el club bávaro y actualmente es el entrenador asistente del segundo equipo.

«El Bayern es actualmente lo que es gracias a Gerd Müller y sus goles»

Franz Beckenbauer.

CARACTERÍSTICAS

Probablemente nadie representa mejor lo que es un delantero centro, a pesar de que su físico era cuando menos extraño para un futbolista. Era bajo, con las piernas muy cortas y tampoco tenía demasiada velocidad. Pero consiguió transformar todas estas desventajas en virtudes, ya que esas pequeñas piernas escondían una tremenda potencia de salto y una explosividad en la arrancada inaudita. Además tenía un centro de gravedad tan bajo que lo hacia moverse a las mil maravillas en el área de gol. Su remate de cabeza era tremendamente efectivo y su potencia en el disparo era descomunal. Poseía un hambre de gol interminable y conseguía estar situado en el momento justo y en el lugar idóneo para rematar cualquier centro o pelota suelta en el área. Torpedo Müller, el gol hecho futbolista.

LINKS

1. Vídeo compilación                 

www.youtube.com/watch?v=-CNtOQW12cA

2. Vídeo compilación                 

www.youtube.com/watch?v=m5eKRnk4Fuo&NR=1

3. Gol contra Holanda               

www.youtube.com/watch?v=J8522vtThgY&feature=related

4. Doblete ante el Madrid          

www.youtube.com/watch?v=lxZPetV4Crg&feature=related